Álbum SENDERO

Un álbum muy personal que ha estado más de tres años en mi cabeza y sonando en mi coche la maqueta cada vez que viajaba de noche. Algunas veces me atrapaba de principio a fin y otras no conseguía escuchar más de un minuto. Pero algo me decía que debía grabarlo, aunque solo yo lo entendiese.

La trilogía de los sueños del chamán

Sendero no es un disco al uso. Cuenta una historia. Todas las músicas que lo componen, las 6 piezas, responden a un hilo narrativo. Cuentan la vivencia de un ser humano en el paleolítico, que también eres tú. Y creo que esa historia se puede interpretar desde distintas perspectivas. Para mi representa el momento en que has de decidir si te mantienes fiel a ti mismo, o si realizas tantas concesiones que tu esencia es abandonada. Y creo que este momento está reflejado en el final del segundo sueño: en ese canto-lamento de pura soledad, porque nadie puede decidir por ti, ni nadie puede entender la trascendencia de ese momento vital. Un canto-lamento que se queda colgado, que desampara al oyente.

Sendero son tres sueños, cada uno de ellos precedido por un preludio. Los preludios anuncian (a veces con texto y a veces solo con la intención de la música) qué es lo que va a suceder en el sueño y dónde se desarrolla, aunque en sí mismos ya contienen su sueño. 
El primero ocurre en el hueco de un árbol. El segundo, junto a un manantial que brota de la montaña. El tercero en el interior de una cueva.

Origen

En el estuche del CD se explica cómo vinieron estas músicas a mi. Cómo la inspiración me abordó una noche en la que todo me parecía incierto. Uno tras otro, los sueños fueron llegando en aquella noche de vigilia, hasta la cocina de aquel apartamento donde vivía, junto al río Arlanza.

Y después, una vez que el disco estuvo grabado y comenzaba el proceso de mezcla, volviendo de un concierto en Moscú me quedé traspuesto al poco de despegar de madrugada, y visualicé cómo era el diseño de este disco. Esos dos trazos arcaicos, uno rojo y otro ocre, separados en el principio, hasta unirse en el final. Y cuando en el propio sueño estaba fijándome en los detalles, mi compañero de asiento me despertó para decirme que estaban sirviendo el desayuno. He pensado mucho en aquella visión y en su significado.

Grabación

Para grabar este álbum pensé en Andrés Ama. Físicamente solo nos habíamos visto una vez, cuando él vino a grabarme una locución para un proyecto suyo. Hubo esa química tan importante para mi. Cuando decidí que había llegado el momento de grabar este trabajo se lo propuse y aceptó inmediatamente. Se lo agradezco de corazón.
Pasamos una semana en Covarrubias, grabando en el torreón de doña Urraca (o torreón de Fernán González, siglo X) gracias a la generosidad de Millán, su propietario y a la paciencia de Paloma. Lo premezclamos en el salón de mi casa y se fue a su estudio a terminar la mezcla y masterización.

Puedes adquirir este disco en formato Digipack o descarga digital desde mi tienda oficial:

https://silberius.com/es/c/sendero-neonymus

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Mil gracias por tu interés en mi humilde música.

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